Los humedales son ecosistemas donde el ciclo hidrológico es el factor fundamental que genera, conduce y sustenta dinámicas ecológicas entre el suelo, la biodiversidad, y su relación con la población humana (MMAyA, 2024). Con esa premisa, Bolivia se adhiere a la Convención Ramsar declarando 11 sitios como humedales de importancia internacional entre 1990 y 2013, que suman alrededor de 15 millones de hectáreas (14,8 Mha), posicionando al país con la superficie más extensa a nivel global y, a su vez representando el 13% del territorio nacional.