Ecuador: comunidades indígenas presentan un recurso contra el Estado ante la Corte Constitucional

Las nacionalidades Sinangoe y waorani, que viven en la parte amazónica de Ecuador, presentaron este martes 6 de septiembre un recurso legal contra el Estado, en la Corte Constitucional. Exigen que se respeten y apliquen las decisiones judiciales rendidas a su favor, hace años, por tribunales provinciales. Se esperaba que estas decisiones prohibieran las actividades petroleras y mineras en sus territorios. Pero el Estado nunca las ha puesto en práctica.

Un recurso por incumplimiento. Esta es la demanda que fue presentada este martes 6 de septiembre a la Corte Constitucional ecuatoriana en la capital, Quito, por una delegación de representantes de dos nacionalidades de la Amazonía ecuatoriana: los Waorani y los Sinangoe. 

La delegación, acompañada por medio centenar de miembros de las comunidades, decidió seguir con su batalla legal, considerando que el Estado no está cumpliendo con los fallos dictados por dos tribunales, en sus respectivas provincias amazónicas. 

Presentan informe que aporta datos para preservar el 80% de la Amazonía al 2025

El portal Ecociencia informó sobre la presentación de una investigación que reafirma el rol trascendental de los pueblos indígenas en la protección de la Amazonía y que pone a disposición nuevos datos sobre deforestación y las áreas prioritarias con 13 soluciones para proteger el 80% para 2025. Se dice que el estudio incluye una propuesta innovadora de condonación de deuda para salvaguardar 255 millones de hectáreas de ecosistemas intactos en riesgo inminente. El informe «La Amazonía a contrarreloj: Un diagnóstico regional sobre dónde y cómo proteger el 80% al 2025» se presentó en el marco de las actividades de la V Cumbre Amazónica de Pueblos Indígenas.

Líderes indígenas amazónicos e investigadores de nueve países presentaron una nueva evidencia que demuestra que la Amazonía se encuentra inmersa en una crisis o punto de no retorno debido a las altas tasas de deforestación y degradación que, combinadas, alcanzan ya el 26% de la región; sin embargo, el 74% restante (629 millones de hectáreas de áreas prioritarias) sigue en pie y requiere protección inmediata. El punto de no retorno debe ser entendido como el inicio de una metástasis o la destrucción irreversible del ecosistema.