La República
4 de mayo de 2021
Tras haber logrado el reconocimiento de la primera Área de Conservación Privada – ACP de su territorio, los directivos de la Comunidad Campesina La Jalca, en Amazonas, iniciaron un nuevo proceso ante el Estado, a través del cual lograron ampliar el ACP a 26.216 hectáreas (ha) de bosques y yungas.
En abril del 2015, se reconoció 17.502 ha de ecosistemas reguladores de agua y refugio de vida silvestre, como el ACP Llamapampa – La Jalca.
Este lugar es hogar de 130 especies de plantas como el cedro (Cedrela montana), que representa el hábitat para 65 especies de aves, 29 de mamíferos, 7 de anfibios y 8 de reptiles, como tangara cabeza blanca (Sericossypha albocristata), rana ladrona de Schulte (Pristimantis schultei) y la lagartija de paja (Petracola ventrimaculatus), categorizados como vulnerables por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza – UICN.
Territorio
Según indica Lleydy Alvarado, especialista de Naturaleza y Cultura Internacional, el territorio protegido representa para las poblaciones cercanas una importante fuente natural de agua para consumo y aprovechamiento en las actividades agroproductivas, y cuenta con un paisaje ideal para desarrollar ecoturismo.
“Es un área que ha contado con el compromiso de la comunidad, y gracias a su establecimiento, aseguramos los servicios ecosistémicos que las yungas y páramos le proveen a la humanidad”, indicó la especialista a La República.