De la Amazonia para el mundo: así debería ser la bioeconomía de la región
ás de 300 líderes se reunieron en Belém, Brasil, para discutir cómo apartarse de una economía que degrada el bosque. Las recomendaciones serán entregadas a los Gobiernos de los nueve países que están en la zona.
Con el tiempo se ha popularizado una famosa frase que dice que “el cambio climático es el mayor fallo que el mercado ha visto”. Su origen apunta a 2006, cuando el reconocido economista Sir Nicholas Stern, por encargo del Gobierno de Reino Unido, publicó lo que pasó a conocerse como el Informe Stern, un reporte en el que se señala el impacto que tiene el cambio climático para la economía global.
Una frase similar, también, se escuchó durante los últimos dos días en la ciudad amazónica de Belém, Brasil, donde más de 300 líderes, indígenas, miembros de la sociedad civil y representantes de los Gobiernos locales, se reunieron para realizar la primera Conferencia Panamazónica por la Bioeconomía. “Tal cual como la entendemos, la economía está llevando a la Amazonia a un punto de no retorno”, fue lo que se repitió más de una vez durante el evento. Una preocupación que no solo debería regional, sino mundial, pues de lo que pase en el Amazonas depende el rumbo que tome el mundo. Si no se cambia el modelo extractivista que actualmente enfrenta la región, puede que sus bosques dejen de capturar carbono: que deje de ser el apodado “seguro del mundo”.